La Iglesia Católica convocó a una jornada de oración y diversas actividades que incluirán el repique de campanas, horas santas, misas y altares en honor Al Padre Marcelo Pérez, asesinado recientemente en el estado mexicano de Chiapas, así como para pedir por la paz y el fin de la violencia en la región.
La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) hizo un llamado a la comunidad eclesial para “redoblar nuestros esfuerzos por la paz”, a través de un comunicado publicado este 30 de octubre.
En ese sentido, exhortó a todas las iglesias católicas del país a realizar actividades en favor de esta causa los primeros días de noviembre.
Actividades programadas
El 1 de noviembre, Solemnidad de Todos los Santos, los obispos mexicanos invitaron a que en todos los templos del país se realice una Hora Santa para pedir por “el eterno descanso del P. Marcelo y todas las víctimas de violencia”, así como por “la paz en Chiapas, el fortalecimiento de todas las comunidades afectadas” y “la consolación de las familias que sufren a lo largo y ancho del país”.
La comunidad tzotzil, grupo indígena ubicado en el noroeste y suroeste de la ciudad de San Cristóbal, de donde era originario el P. Pérez, realizará una peregrinación que comenzará a las 8:00 a.m. (hora local), seguida de una Misa a las 12:00 p.m. en la Catedral de San Cristóbal Mártir. Los obispos instaron a que en todo el país se unan “espiritualmente” a estos actos.
Asimismo, invitaron a las diócesis a expresar su solidaridad mediante gestos como “la organización de peregrinaciones simultáneas”, “el repique de campanas” a las 08:00 a.m. y la instalación de “un espacio dedicado a la paz”, que puede incluir una lámpara o cirio, un retrato del P. Marcelo, ofrendas o “cualquier otra manifestación que refleje la comunión eclesial y el acompañamiento espiritual con el pueblo chiapaneco”.
Los obispos también animaron a que, del 1 al 7 de noviembre se ofrezcan misas por “la paz en Chiapas y en todas las regiones afectadas por la violencia”, “el eterno descanso del Pbro. Marcelo y de todas las víctimas de la violencia” y “las vocaciones sacerdotales y religiosas en las zonas más necesitadas”.
Además, se invitó a rezar el Santo Rosario en familia y comunidad, “recordando que el dolor de una región es el dolor de toda la Iglesia”.
Los obispos mexicanos animaron a compartir todos estos actos en redes sociales con el hashtag #ChiapasNoEstaSolo, “como testimonio de nuestra solidaridad”.
Estas actividades, explicó la CEM, se realizan para “acoger el dolor de todos sus hijos”, en especial por Chiapas, pero “sin olvidar el clamor que se eleva desde Culiacán, las poblaciones de Guerrero y Michoacán, como de cualquier rincón de nuestra patria donde la violencia desfigura la sagrada dignidad de la vida humana”.