COATZACOALCOS Ver. – En nuestro país, lo hemos reiterado, la realidad es increíble, y lo increíble, se vuelve realidad. Lo anterior quedó confirmado el pasado fin de semana cuando tres migrantes de esos que en el pasado eran objeto de reportajes durante su trayecto a bordo de la “bestia”, el tren así denominado, en autobús donde solo tenían que cantar el himno nacional para no ver interrumpido su viaje hacia la frontera norte y que hoy son perseguidos, interceptados y deportados al ser detenidos en alguno de los retenes de seguridad que instalados para la captura de personas al margen de la ley o cargamentos con substancias prohibidas, no han logrado incautar nada en los últimos tres años, que no sean personas que ingresaron ilegalmente por la frontera sur
*** Kevin, Faustino y Durvin, hicieron un alto en su peregrinar a la búsqueda del sueño americano en las playas de Coatzacoalcos, aprovechando la falta de vigilancia, señalamientos y medidas restrictivas; luego de disfrutar de las cálidas aguas del Golfo de México decidieron descansar en la arena, siendo despertados por los gritos de auxilio de la familia Bautista Hernández de Tizayuca, Hidalgo que jugueteaban en la playa del antiguo Puerto México, donde las pozas y las corrientes de agua son más peligrosas que los tiburones.
*** La corrientes de agua los arrastró y de los siete integrantes de la familia, solo cuatro lograron ser rescatados por los migrantes pereciendo el abuelo y dos de sus nietos; los cuerpos de auxilio y policiacos arribaron al lugar de los hechos y antes que atender a los sobrevivientes, intentaron capturar a los migrantes para su deportación, lo que fue evitado por quienes presenciaron la escena y dieron fe de que los indocumentados, como las velas, se quemaron pero dieron luz a los demás haciendo el bien, sin ver a quien.
***Comerciantes locales, al conocer los hechos mediante las otrora “benditas redes sociales”, ofrecieron hospedaje, comida y bebidas a los ilegales por su buena acción, los cuales ya no pudieron disfrutar poniendo pies en polvorosa, antes de que les cayera todo el peso de la ley temerosos de lo que ya se sabe reza la conseja popular, que la policía, siempre vigila.
*** En el pasado, en cambio, con los gobiernos considerados corruptos e inmisericordes, otro fue el trato para Isaías Sánchez Nava, quien como los migrantes sin pensarlo dos veces se lanzó desde el puente Coatzacoalcos I para tratar de rescatar a una familia que cayó con su auto a las aguas del río Coatzacoalcos el último día del año 1973; logrando rescatar a una niña y los cuerpos sin vida de la mamá y la hermana, otros dos menores aparecerían horas después.
*** Pancho King, el alcalde, le hizo un reconocimiento especial en el Cabildo, escuelas y organizaciones sociales hicieron lo propio, Chico Balderas, le ofreció una planta en Pemex, la Marina Mercante su libreta de mar para laborar en cualquier embarcación; el “Paneco” Vargas organizó un partido de beisbol y lo recaudado le fue entregado totalmente, lo mismo que un reloj rolex, obsequio del club Rotario; el gobierno honesto y humanista de la 4 T, dio en cambio a los migrantes, una patada en salva sea la parte por su heroísmo, con las consabidas gracias para no ser deportados (todavía). Ni modo, así pasa cuando sucede.
*** Sugerencias y comentarios sogo51@hotmail.com.
