El Superman bisexual, esperado en los próximos días, es solo la última pieza en orden cronológico de una verdadera estrategia global, planificada, programada, inquietante.
¿Por que? Porque, desde la muy agresiva Disney hasta Cartoon Network, al final tratamos de inculcar la ideología LGBT en las nuevas generaciones, sin importar si esto sucede o no incluso en los pupitres de la escuela.
Unos días de espera ahora y todos los fanáticos de Superman, creado en 1933 por Jerry Siegel y Joe Shuster, podrán dejar caer los brazos: el 9 de noviembre, de hecho, como es bien sabido, el superhéroe, que ha conquistado a generaciones enteras de niños con sus poderes, aparecerá bisexual en el libro de DC Comics.
¿Extraño? ¿Le pareció de mal gusto la publicidad para relanzar la revista?
No, probablemente nada de esto. Es difícil, de hecho, no ver una acción planificada, una estrategia concertada en lo que está sucediendo no tanto y no solo con Superman, sino más en general en el mundo del cómic y los dibujos animados, especialmente estadounidense.
Demasiadas intervenciones tontas por parte de editoriales y productoras para pensar en simple aleatoriedad, coincidencias triviales, concomitancias inesperadas.
Empecemos por Disney. Solo por mencionar los casos más recientes, pensemos en la plataforma DisneyPlusFR, que ha hecho que algunos títulos históricos como Los Aristogatos, Peter Pan, La dama y el vagabundo sean accesibles sólo para el público adulto, que de repente se han vuelto ” políticamente incorrectos”.
¿Por qué razón? Con el primero, Los Aristogatos, somos ridículos: se argumenta que los gatos siameses han sido diseñados de tal manera que implican estereotipos indescriptibles hacia los asiáticos; Peter Pan, por otro lado, “heriría” la sensibilidad de los indios americanos. Etcétera. La agencia Médias-Presse-Info escribió : “A tal nivel de absurdo, ya no sabes si reír o llorar”.
Pero Jessica Rabbit también terminó en la picadora de carne de la censura “políticamente correcta”, que tuvo que someterse a algunos retoques en el parque Disneyland de Anaheim, California, para no ser sexy y seductora.
¿Escrúpulos morales? Para nada. Sólo la preocupación por adaptarlo a los nuevos clichés fluidos de género, que son andróginos y absolutamente no binarios. No más curvas, no más escotes, ni pestañas largas ni otros efectos especiales.
Y por este mismo motivo, Lola Bunny también acabó bajo las horquillas caudinas LGBT, que, como bien saben los fans de Space Jam, en la secuela ha reducido sus pechos, abandonó la cima.
Shorts mullidos y muy cortos, para mostrarse vistiendo un uniforme muy casto, al igual que sus compañeros. Las mujeres, al estilo de género , las quieren así, al igual que los hombres. El cual, a su vez, debe volverse parecido a las mujeres, sin pelo y mejor aún si es un poco afeminado.
Peor aún para la película de Disney Toy Story 4: en una de las escenas de apertura muy cortas, cuando la nueva dueña de Woody, Bonnie, está en su primer día de jardín de infantes, se muestra una pareja LGBT, específicamente dos madres lesbianas y “Multicultural”, siempre en homenaje al estilo de género. Esto llevó a varias asociaciones de padres de Estados Unidos a pedir un boicot de la película.
Pero estos no son nuevos. Como prueba de una estrategia planeada desde hace algún tiempo, cabe recordar un episodio de la ficción titulado Érase una vez, en el que Mulan reveló su amor a La Bella Durmiente, quien en cualquier caso no respondió a estos sentimientos, evidentemente prefiriendo al Príncipe Azul.
Sin mencionar el merchandising del “arcoíris”: las tiendas de Disney han lanzado una línea temática, como las orejas del “arcoiris” LGBT coleccionables. Y nuevamente pensamos en la hospitalidad otorgada a los Gay Days anuales no oficiales en Disneyland y Disneyworld.
Todavía. La comedia «¡Buena suerte, Charlie!», Propuesta por Disney Channel , convirtió a dos lesbianas en las protagonistas de todo un episodio. La cadena de televisión, además, había dejado claro que quería presentar personajes LGBT. Y así fue.
Al igual que la serie The Fosters, también producida por Disney junto con Abc y emitida durante cinco temporadas, de 2013 a 2018, en ABC Family y ABC Spark en Canadá. Fue creado por Bradley Bredeweg y Peter Paige, ambos abiertamente homosexuales.
Es la historia de una pareja de lesbianas con hijos biológicos y adoptados; pero ya en la segunda temporada, se ve a Jude de 14 años, el hijo menor, besando a Connor, su amigo de la escuela. En 2016 hizo su aparición una nueva pareja LGBT, la del Sheriff Blubs y el Congresista Durland, en la caricatura Gravity Falls, también transmitida por Disney Channel .
Ruthie Tompson, la animadora histórica de muchas películas exitosas de Disney, desde Blancanieves y los siete enanitos hasta Pinocho, desde La bella durmiente hasta Bambi, que murió hace unos días mientras dormía en su casa de Los Ángeles a la hermosa edad de 111 años, sí ya se convertirá en la tumba.
Ciertamente no fue por eso que trabajó en las películas que entraron, también gracias a ella, en la historia del cine de animación y que hicieron grande a Disney.
Cabe señalar que en todos estos casos no faltaron las protestas de los padres y diversas organizaciones del sector, que sin embargo permanecieron inéditas.
Por otro lado, sin embargo, la multinacional de abortos Planned Parenthood, con un tuit que luego fue retirado por la infinidad de críticas recibidas (incluso desde dentro), llegó incluso a escribir: “Necesitamos una princesa de Disney, que haya tenido un aborto”, ya sea a favor del aborto, ser un inmigrante ilegal y ser trans”.
Planned Parenthood trató de justificarse, alegando que solo quería provocar un debate, pero nadie la creyó.
Cambiar de canal no cambia la historia. CN-Cartoon Network , en 2018, en la última temporada de la, por desgracia, exitosa serie Adventure Time presentó un beso lésbico, mientras que el personaje de Steven Universe propuso un matrimonio entre mujeres. Al año siguiente, en 2019, en un post de Cartoon Network no encontró nada mejor que desear “a todos un FELIZ ORGULLO”, animando a “todos los fans Lgbtq + a estar orgullosos todo el año”.
Y también en junio de 2020, “el mes del orgullo LGBT”, transmitió programas ad hoc y asesoró en su sitio web lecturas web “tema”, así como una selección de videos “dedicados” a la serie animada. Craig of the Creek y Steven Universe, este último premiado por la asociación Lgbt GLAAD con un Media Awards .
En definitiva, si para Agatha Christie dos pistas son coincidencia y tres son prueba, las mencionadas (y representan solo una selección…) son más que suficientes, para confirmar la hipótesis inicial, es decir, aquí se trata de una maniobra planificada, para entrar de manera silenciosa y hasta compasiva con los seres queridos por el público en todos los hogares e inculcar la ideología de género en la cabeza de nuestros hijos, independientemente de que ya esté inculcada en las escuelas o no.
Un gran dibujante contemporáneo, Alban Guillemois, autor de Bernadette y Lourdes: la investigación que le valió merecidamente el Premio Internacional del Cómic cristiano, declaró recientemente en una entrevista con la agencia Médias-Presse-Info: “Hay un gran historiador de Literatura francesa, Marc Fumaroli, quien con razón dijo: “La cultura es otro nombre de la propaganda”. Creo que los marxistas entendieron esta historia de conquista por la cultura, a diferencia de los católicos”.
Quizás por eso falta una alternativa cristiana saludable.
Por ANDREA MORANDINI.
ROMA, Italia.
Lunes 1 de noviembre de 2021.
lnuovabq.
