Juchique de Ferrer, Ver.- Un desmadre es el que traen en la tesorería de este lugar, donde culpan al contralor municipal de ser la persona que ejecutó la orden de despedir a ocho trabajadores sindicalizados del ayuntamiento, señaló la señora Concepción Molina Báez, quien con lágrimas en sus ojos narra la forma en cómo sus familias llevan mes y medio sin tener las condiciones necesarias para mantener a sus familias, de donde dependen de ellos personas de la tercera edad y menores.
Empleados que tienen treinta y cinco años de trabajo, treinta y dos y el más mínimo de diez años, fueron despedidos, lo que calificaron como injustificado.
Tres quincenas llevaban sin recibir el sueldo, por lo que la señora Molina Báez, dijo que esta injusticia fue aplicada directamente por el contralor, quien les dijo que estaban dadas de baja del ente público.
A pesar de ser ocho empleados con categoría y trabajos administrativos, fueron sacados de sus escritorios y llevados a realizar tareas de limpieza en calles, carreteras, orden que acataron, pues querían trabajar y conservar sus empleos.
La petición es directa al gobernador del Estado, para que cheque la situación que prevalece en Juchique de Ferrer, donde los empleados sindicalizados no se pueden ni siquiera jubilar, pues administraciones pasadas no realizaron las cotizaciones ante el sistema de pensiones, aunque sí se las cobraron a ellos.
Los empleados sindicalizados están sin saber que hacer y van a acudir a las instancias jurídicas, para reclamar lo que por ley les corresponde.
Atacan a balazos camioneta de CFE en Las Choapas
Una camioneta de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) fue baleada cuando se encontraba estacionada en la calle Libramiento de Pemex entre la colonia El Encanto y Aviación de Las Choapas, municipio localizado al