Si no se recibe la cantidad de votos necesaria para la revocación de mandato en los municipios del norte del estado, hay un responsable y este se llama Jaime Humberto Pérez Bernabe, el diputado federal que sesgó la entrega de apoyos a los damnificados por el huracán Grace.
Le explico, el impacto de ese meteoro se registró el 20 de agosto del año pasado y fueron tan grandes los daños que, el presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó que se hiciera un censo, para hacer la entrega de apoyos a todas las familias afectadas, pero no fue así.
Esos apoyos solo llegaron a sus amigos del reelecto, a los que le aplauden, a sus compadres y, por supuesto, a sus familiares.
El resentimiento en el resto de los habitantes afectados no se hizo esperar y advirtieron que en las próximas elecciones se desquitarían y harían tragar polvo a quien los abandonó, porque lejos de atender la desgracia, su ambición por continuar en el poder lo hizo distante y soberbio.
A lo mejor a Pérez Bernabe ya se le olvidó ese episodio, como aquel refrán que dice “el que preña olvida, pero la preñada nunca” y eso es lo que está sucediendo ahora mismo, en esos municipios que él “representa”, pero que después de que tomó posesión como diputado reelecto, nunca se ha vuelto a parar por esos lugares, para saber qué es lo que necesitan los habitantes de esa demarcación.
Jaime Humberto ya fue alcalde de Gutiérrez Zamora y ahí tiene su casa, su familia, sus amigos y es por eso que el censo se hizo cargado para esos aliados del diputado federal que, por si fuera poco, con sus influencias y presiones políticas colocó en ese Ayuntamiento a los directores de diversas áreas, pero todos son ex perredistas de Papantla, lo que ha provocado una gran molestia entre la población.
Frank Aparicio es su principal operador y fue así, como incluso, colocó al tesorero de Gutiérrez Zamora, sabiendo que todos fueron gente que estuvo en contra de Morena, pero a él nada le importa, solo sus intereses políticos y económicos.
Después de seis meses que tomó posesión como diputado federal, su labor como legislador ha sido completamente gris, como es él, por lo que difícilmente va a recibir el apoyo de los habitantes de esos municipios.
Dicen los que saben de este asunto que, los beneficiados del reelecto además de que no tuvieron pérdidas mayores en sus viviendas, el dinero que recibieron les sirvió para gastarlo en sus antojos, sus lujos como motocicletas, viajes y celulares de última generación.
Los municipios que abarca el Distrito 6 con cabecera en Papantla son: Coahuitlán, Colipa, Coxquihui, Coyutla, Chumatlán, Espinal, Filomeno Mata, Gutiérrez Zamora, Mecatlán, Nautla, Papantla de Olarte, Tecolutla, Vega de Alatorre, Zozocolco de Hidalgo y San Rafael.
Se dijo con insistencia que fueron 2 mil 310 millones de pesos los que se dispersaron para atender las necesidades de los damnificados y, efectivamente, esos recursos llegaron, pero solamente a los aliados del diputado federal que ahora quisiera congraciarse con los habitantes de esta región del norte del estado, pero la gente tiene memoria.
Los coordinadores y operadores políticos de Morena tendrán que hacer un doble esfuerzo en toda esa franja para poder alcanzar la votación que esperan, porque de lo contrario, les van a dar sopa de su propio chocolate.
Así las cosas.
Y el que tampoco canta mal las rancheras, y que es un hecho que no está haciendo absolutamente nada con el electorado a efecto de alcanzar votos para la revocación de mandato en los municipios de Paso de Ovejas, La Antigua, Actopan, Úrsulo Galván y Puente Nacional es Toño Luna, diputado local por el distrito 13 Emiliano Zapata, otro que, aseguran pobladores que sólo figurita es hasta el momento, ya que en nada ha apoyado causas diversas y al sol de hoy lo ven como una figura decorativa en el Congreso del Estado.
Las cosas como son.
periodistapalmeros@hotmail.com
